CASO SGOBBA: TESTIGOS RECONOCEN EL CUCHILLO CON QUE SE COMETIÓ EL DELITO

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Este miércoles en la sala de la Cámara Tercera en lo Criminal y Correccional, se desarrolló la segunda audiencia por el crimen de Víctor Sgobba, dicha causa tiene como imputados a Silvera Álvaro Gastón como autor material del delito de homicidio simple y a Jorge Salvador Licciardi como autor partícipe necesario. En esta audiencia, declaró el médico cirujano Dr. Herrera Nicolás Eduardo, los testigos presenciales del hecho Pineda Nieva Julián y Valenzuela Camila, como así también Tanquía Esteban y Reynoso Raquel Edith.

El Tribunal integrado por las Dras. Sara López Douglas, Edith Agüero y María Haydee Paiaro, por unanimidad rechazaron el pedido del fiscal de cámara, Dr. José Oliveros Icazatti, de citar a declarar a los ciudadanos Pavotti Edgardo Ariel y Gómez Carina. Las magistradas rechazaron el pedido porque ambos testigos están imputados en la misma causa por el delito de Falso Testimonio y Encubrimiento, teniendo Pavotti fecha de audiencia de juicio para el día 22 de octubre de 2019 y a la joven Gómez tiene suspensión de juicio otorgada en abril de 2019.

En esta segunda audiencia, el primero en declarar fue el Dr. Herrera Nicolás Eduardo, médico cirujano del Servicio de Cirugía del Hospital Vera Barros. El doctor comentó que la noche de los hechos estaba de guardia en Trauma Shock y le avisaron que iba a llegar un paciente con herida de arma blanca desde Hospital de Clínica Virgen de Fátima, y enfatizó que le llamo la atención la demora, desde el momento en que le avisaron hasta que llego el paciente Sgobba pasó aproximadamente 45 minutos, eran más de las 03:00 horas de la madrugada. El Dr. Herrera manifiesta que Sgobba llegó al hospital muy grave, casi sin pulso y que no había tiempo para hacerles estudios por lo que se lo pasa inmediatamente al quirófano. “Cuando llegamos al quirófano nos damos cuenta de que ya había fallecido. No pudimos hacer nada, no hubo tiempo”, destacó el cirujano. También, recordó que Sgobba perdió mucha sangre en la ambulancia, y que pudo visualizar dos heridas bien delimitadas con bordes netos de un arma blanca, entre 5 y 10 centímetros de longitud, las cuales una estaba en hueco axilar y la otra en parte baja del tórax (espalda). “Probablemente la herida puedo haber lesionado el pulmón o hígado”, enfatizó el profesional, y posteriormente manifestó que en Hospital de Clínicas no se le hizo nada al paciente respecto a la parte quirúrgica porque no tienen cirujano de guardia. El cirujano Herrera destaco que “El paciente ingresó lúcido, en shock hipovolémico y pedía que no lo dejen morir”.

Siguientemente, fue llamado a declarar el joven Pineda Nieva Julián, del B° CGT Sur, declaró que conoce a los dos imputados, pero no se considera amigo de ninguno. Pineda declaró que la noche de los hechos estaba tomando vino en la casa de su amigo Iván Reynoso, junto a Licciardi, Silvera, Tanquia Esteban y Pavotti Edgardo, estaban tomando desde temprano por lo que dejo en claro que todos estaban en estado de hebriedad; pero su relato fue confuso ya que en un principio dijo que vio a Licciardi siendo atacado por Sgobba, “había forcejeo, golpe de puño de Licciardi hacia Sgobba para sacárselo de encima”, señaló que él no participó de la pelea y que pudo ver desde unos 5 metros a Silvera, Pavotti y Licciardi tirale piedras a Sobba, posteriormente al contar más detalles de la pelealo hizo incluyéndose, “Nos fuimos a defender a Licciardi, yo lo empujé a Sgobba para que se fuera, él arrancó su moto y se fue”. La Dra. López Douglas notó contradicciones y le pidió ser más claro, por lo que el joven Pineda terminó reconociendo que, si había participado en la pelea contra Sgobba, pero aclaró que no vio a Silvera con un cuchillo. Asimismo, Pineda negó haber manipulado el celular de Licciardi y conversado sobre juntarse con Sgobba.

Por otra parte, hizo su versión de los hechos el ciudadano Tanquía Esteban, vecino de los imputados, quien dijo que estaban tomando bebidas alcohólicas y en un momento se van Licciardi, Silvera, Pavotti y Pineda, demoran unos minutos y luego vuelven, acompañados por Gómez Carina y Valenzuela Camila. Tanquía testificó que, “Carina vino a mí llorando y diciendo que habían golpeado a un hombre, yo intentaba calmarla. Escuché a Iván Reynoso decir que vio a Silvera lavar un cuchillo en la cocina, por eso los corre de la casa”. El joven Tanquía expone que estaban poniendo música con su celular y que no escucho a nadie hablar sobre reunirse con alguien debido a que la música estaba fuerte, de esta manera contradice el testimonio que Licciardi que dijo que usaban su celular para poner música y todos lo manipulaban. El día siguiente a los hechos, Tanquía dice que la madre de Ivan Reynoso lo llama para que le comente lo sucedido y le pide que vaya a la policía a declarar, por lo que Tanquía se hace presente en la casa de Reynoso y ve a la madre sacar un cuchillo de un mueble, dicho cuchillo es señalado por Iván Reynoso como el arma blanca que Silvera estaba lavando en la bacha de la cocina. Debido a un pedido del fiscal, se le expone a Tanquía el cuchillo secuestrado y éste lo reconoce como el cuchillo que estaba en la vivienda de Reynoso.

Otro testimonio fue el de la señora Reynoso Raquel Edith, dueña de la vivienda donde se encontraban tomando Licciardi y Silvera. Respecto al allanamiento en su vivienda, la señora Reynoso revela que la policía saco restos se sangre de la bacha de la cocina y se llevaron un chuchillo. A la señora Reynoso también se le mostró el cuchillo secuestrado, lo reconoció como de su propiedad, y comentó que lo tenía guardado en un mueble de la cocina ya que nunca lo había usado. Manifestó que fue su hijo Iván fue quien identifica el cuchillo, ya que él lo ve a Silvera cuando lo lavaba en la bacha. También reveló que a su hijo Iván lo amenazaron, pero no recuerda quien fue.

Finalmente, la segunda audiencia culminó con el testimonial de Valenzuela Camila, que dijo conocer a los dos imputados porque eran vecinos. La noche del fatídico hecho, Camila explicó que estaba con Carina Gómez afuera de su vivienda y observa a media cuadra a un hombre en su moto con el casco puesto, al frente de él estaba Licciardi. Luego, vio que el hombre empuja a Licciardi y éste le pega en la cabeza, posteriormente ve salir desde la plazoleta a Silvera, Pineda y Pavotti, y éstos le tiraban piedras al hombre de la moto, también ve que le pegaban y el hombre se caía y se volvía a levantar con su moto siempre al lado, descartó haber visto un cuchillo. Luego del hecho, la joven Camila reveló, “Pavotti me buscó para que hable con su madre, quería que lleguemos a un acuerdo”.

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