CONCLUYÓ JUICIO POR ABUSO SEXUAL CON ACCESO CARNAL SEGUIDO DE MUERTE

Este martes, el Tribunal de la Cámara Tercera en lo Criminal y Correccional de la Primera Circunscripción Judicial, conformado por las Dras. Sara Alicia López Douglas, Edith Elizabeth Agüero y el Dr. Jorge Gamal A. Chamía, realizó la última audiencia del juicio en contra de Javier L. R., acusado de “Abuso sexual con acceso carnal, agravado por la muerte de la víctima”, previsto y penado en los artículos 119 1° y 3er párrafo, y 124 del Código Penal.

Una vez iniciada la jornada de debate, se incorporó por lectura la declaración de quien fuera al momento de los hechos, Directora de Niñez y Adolescencia de la Provincia. A continuación, se realizó la incorporación de la prueba documental, para luego dar lugar a la etapa de alegatos.

En primer término, el fiscal Dr. Rafael López, se refirió a las situaciones de violencia relatadas por la madre de la víctima, testimonio que coincide –indicó- con lo que declararon en el juicio, profesionales de psicología que atendieron a los hijos e hijas del acusado, terapistas ocupacionales y vecinos.

Del mismo modo, señaló actitudes de rechazo, discriminación y violencia por parte del imputado hacia uno de sus hijos, al cual no reconoció legalmente. Asimismo, reveló que surgió de testimonios que el acusado manifestaba conductas de intolerancia para con la víctima.

Luego de realizar una cronología de los hechos, López profundizó en los informes médicos, los resultados de pruebas químicas y biológicas, y los testimonios de profesionales de la salud que, para esta parte, dan cuenta de la existencia del abuso sexual seguido de muerte.

Seguidamente, puso en valor la declaración en Cámara Gesell de las hermanas mayores y uno de los hermanos de la víctima, como así también, los informes de los psicólogos que los trataron.

Finalmente, mencionó contradicciones en las tres declaraciones indagatorias efectuadas por el acusado, dos en sede de Instrucción y una durante el desarrollo de este debate.

Por su parte, el fiscal Dr. José Oliveros Icazatti, señaló el malestar social respecto a la causa y pidió al Tribunal, una resolución acorde a los elementos probatorios presentados. En ese sentido, dijo que tras la valoración y análisis de las pruebas, el Ministerio Publico Fiscal considera que Javier L. R. es autor penalmente culpable y responsable del delito que se le acusa, por lo que solicitó la pena de prisión perpetua.

Por otro lado, el defensor Dr. Fernando Romero, calificó como improcedente el pedido de Fiscalía, debido a que, para esta parte, hay dudas sobre la participación de su defendido en la causa.

En ese marco, recalcó que ningún testimonio sitúa a su cliente en la habitación de las niñas, donde se habría encontrado la víctima la mayor parte del tiempo, desde que su progenitora salió del hogar hasta que regresó al mismo.

Además –añadió- no se incorporó en el proceso el acta de defunción de la menor, con lo cual no hay prueba legal de su muerte, algo que tildaron como “irregular”. Sostuvieron también que, no está claro en los informes médicos, si se trató de muerte súbita o violenta, por lo que se desconoce la causa real de la muerte.

Por otra parte, aseguraron que no hay ninguna prueba que acredite que fue el imputado quien accedió carnalmente a la niña. Al respecto, recalcaron que no se investigaron otras cuestiones que surgieron de la declaración de su defendido, como por ejemplo, las “inconductas” de uno de sus hijos.

Por último, expresaron que, ante el estado de duda, el Tribunal debe declarar la absolución de su cliente.

Las últimas palabras:

Al finalizar los alegatos, el acusado hizo uso de sus últimas palabras y dirigiéndose al tribunal manifestó su inocencia, marcó los errores que considera que tuvo Fiscalía y pidió justicia por la víctima.

Detalles del hecho:

El hecho ocurrió el 9 de septiembre del 2015, en horas de la mañana, en ocasión en que la madre de la víctima de 5 meses de edad, salió de la vivienda a hacer trámites y dejó a la beba y a sus otros cinco hijos menores de edad a cuidado del acusado. En ese contexto, el imputado habría aprovechado para abusar sexualmente de su hija menor, la cual se encontraba junto a él en la habitación matrimonial. La habría accedido carnalmente, lo que le habría ocasionado un traumatismo en la zona del ano, provocándole la muerte por paro cardiorrespiratorio irreversible.